El Sindicato SOESGYPE, a través del Delegado Regional Olavarría, Lucas Newbery, viene a poner en conocimiento de la sociedad olavarriense en su totalidad que a las 'violencias' se deben enfrentar en todos los ámbitos.

Que los trabajadores y trabajadoras del Estacionamiento Medido de Olavarría, vienen sufriendo actos cobardes de agresión por parte de ciudadanos. Agregó que viven de esta manera, presas del miedo a la humillación

Que los hechos, prioritariamente tiene como objeto a las mujeres trabajadoras y por eso quieren visibilizar el lenguaje violento al que muchas veces nos acostumbramos a oír en los espacios de la calle.

Buscan visibilizar este tipo de problemática social; y aseveró: “tenemos que empezar a modificar ciertos hábitos si queremos prevenir la violencia y el primero es vincularnos con respeto”

Nada justifica el maltrato; ni nervios, ni las impaciencias, la falta de comprensión del trabajo del otro, cuando esto se traduce en gritos, amenazas, hasta burlas sobre sus vidas privadas, culpabilización por acciones que están legalmente determinada por Ordenanza.

“No nos vamos a acostumbrar a oir lenguaje y hechos violentos, nos negamos y esperamos que las autoridades judiciales estén a la altura de lo que la sociedad exige”.

Violentar (de cualquiera de las formas) a un trabajador o trabajadora mujer no es algo cultural, es un crimen, y debe ser dirigido y tratado como tal.

Los y las trabajadoras, No quieren sentirse valientes cuando salgan a la calle. Quieren sentirse libres para trabajar.

Basta ya de minutos de miedo, de humillación, de dolor, de silencio.

“Tenemos derecho a que todos los minutos sean de libertad, de felicidad, de amor, de vida en nuestro trabajo”

Hechos: Siendo las 10,30 hs, una trabajadora se encontraba en Dorrego casi Brown, haciendo un control de tiempo mínimo, sobre una camioneta Amarok; cuando el supuesto propietario/responsable del vehículo se presentó por el aviso de un vecino y lo hizo de una manera claramente violenta, amenazante de ejercer violencia física

La víctima y compañera, solicitó asistencia tanto a Policía como Control Urbano, y más tarde también se presentaron los encargados de la empresa. Se realizó denuncia policial.