En Sierras Bayas hoy se desempeñan unos 30 trabajadores: 22 que están agremiados en AOMA, 6 en una empresa de servicios y los jerárquicos.

Desde el gremio indican que se estaría capacitando a parte de ese personal para que comience a desarrollar tareas en la nueva fábrica, luego de un traslado.

Insisten con que el cierre de Sierras Bayas sería antes de la apertura de L’amalí II.

En caso que esto suceda, el personal que no se acoja a los retiros, debería trabajar en la Planta Olavarría, antes de comenzar a desarrollar tareas en L’amalí.

Califican como ‘fuerte’ el golpe simbólico, justo en el año en que se conmemora el siglo del primer despacho de cemento del país que, además, salió de esa planta.