En el primero de los casos, la multa para el conductor -al que se le constató un grado de alcoholemia de 1.12%- es de $16.068 aunque no estará inhabilitado para conducir, ya que la infracción se produjo antes de la nueva ley de tránsito.

Es destacable que fue de $35.344 la sanción estipulada para un conductor que en septiembre de 2018 se negó a la realización del test.

Otra de las multas en situaciones del año pasado, fue para un conductor reincidente que -tras ser detectado con 0.9 mg/l de alcohol en sangre- tendrá que abonar la suma de $26.508 y estará inhabilitado seis meses para conducir.

También fueron sancionados dos conductores que no podrán conducir por el plazo de seis meses y tendrán que abonar una multa de $8836 cada uno, tras constatarse alcoholemia positiva de 0.62% y 0.63%.

Finalmente, fueron sancionados cuatro conductores a los que la semana pasada se les constató un grado de alcoholemia positivo. La multa más baja es de $12.701,75 (6 meses de inhabilitación para conducir) tras constatársele 0.86% de alcoholemia positiva y la más alta es de $22.090 (12 meses de inhabilitación para conducir) con 1.1% de alcoholemia positiva.