El informe, elaborado por el sector de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), arrojó además las siguientes conclusiones:

Por los productos agropecuarios, la diferencia entre el precio que se le pagó al productor y el que abonó el consumidor en góndola (brecha entre precio de origen y destino) aumentó 7% con respecto al mes anterior.

El 58,3% de los agroalimentos medidos aumentaron sus brechas entre origen y destino, mientras que el 41,7% restante registró una baja. Cebolla y naranja fueron los productos con mayor variación mensual, mientras que la menor se produjo en frutilla y limón.

Para el 54,2% de los productos agropecuarios relevados, los precios en los comercios de cercanía fueron menores a los importes que ofrecieron los hipermercados.

En promedio, la participación del productor en el precio final de venta de los 24 agroalimentos de la canasta IPOD fue tan solo del 25,9%, convirtiéndose en la más baja del año.