Fue Wesner el que señaló que están muy bien en cuanto al nivel de trámites, ya que atienden unas 100 personas por día en la UDAI y se liquidan alrededor de 200 jubilaciones al mes.

Méndez, por otro lado, destacó la decisión política de volver a liquidar los cómputos en un esquema descentralizado.

Los trámites tardaban un año cuando ellos se asumieron y la idea era bajarlo a seis meses. En Olavarría se trabaja a unos 45 días, lo que es un número muy bueno, explicó.

Agregó que no está confirmado el pago de un cuarto IFE. Dependerá del Tesoro, manifestó. Pidió responsabilidad por la situación del país y no crear falsas expectativas.

En esa línea, también se refirió a la discusión que se iniciará en el Congreso con la nueva fórmula de actualización de las jubilaciones.

El objetivo, dijo, es recuperar el casi 20% de poder adquisitivo que las jubilaciones perdieron en lo últimos 4 años, al finalizar el mandato de Alberto Fernández.

Federico Aguilera declaró que tanto el IFE, como el ATP, son medidas paliativas para que se alivien los efectos de la pandemia.

Respecto a ATP solicitó a los empresarios que no los incorporen a los balances de las empresas.

Finalmente, como cifra destacable, indicaron que ANSES puso en la economía de Olavarría en los últimos seis meses, mas de 1200 millones de pesos, entre ATP e IFE.

Eso se suma a la erogación ordinaria del organismo de jubilaciones, pensiones y asignaciones, que en Olavarría son algo más de 700 millones de pesos.