Agregó que la obra comenzó a fines de septiembre y el plazo original era de 180 días.

Ya están más allá del tiempo estimado y no se cumple con los adjudicatarios con algo que era el quid de la cuestión de este tipo de construcción, según había manifestado el intendente, explicó Wesner: el menor tiempo que llevaría levantar las casas.

En referencia a las reuniones que tuvo el Ejecutivo con los adjudicatarios fueron parciales y no se encontraron con todos al mismo tiempo.

Respecto a la firma “Mariano Escobedo” que es el constructor, la responsable técnica original renunció, según pudieron ver en el expediente, una vez que estalló el escándalo.

Reafirmó que el pedido de suspensión de la obra es para que los adjudicatarios pueden ingresar, sin que haya personas trabajando, con algún experto técnico a observar.