Ofrenda, nos remite al “suelo”, como símbolo ordenador de pensamiento y un modelo posible para habitar y “estar” en América. Suelo, como el lugar donde acontece lo humano, y se es partícipe de una cultura que reconoce no sólo aquello que es aportado por la tradición sino también, el horizonte simbólico a partir del cual el hombre halla su amparo para dar sentido a su existencia”.

Ofrenda, es el inicio de un ritual silencioso que refleja nuestros sueños, dolores y temores, con la visión de habitantes del mundo de hoy. Cada una de las obras es nuestra ofrenda hecha imagen, un pensamiento plástico que aspira a aquellos mitos que permitan renovarnos y vincularnos con lo eterno, definieron las artistas que integran el grupo.