La profesional, en diálogo con LU 32, dio un panorama actual sobre la obesidad: “Es absurdo que el Ministerio de Salud de la Nación no declare la obesidad como una enfermedad”. Todavía en la Argentina no es así. Y es el primer paso e iniciar temprano el tratamiento por los costos. No existe el capital humano especializado para la obesidad. También pidió que los medios ayuden a difundir.

Sobre la dificultad o tabú para hablar del tema dijo: “Hay grupos que consideran que hablar de obesidad es discriminar a las personas corpulentas”.

En referencia a leyes que aborden el tema expresó: “Hay pequeñas acciones, pero nada impacta como coordinar acciones. Utilizar lo que hay y desarrollar nuevas acciones que impacten en la salud. Por ahora no hay resultados interesantes. El proyecto busca ser un paraguas que contenga.

Sobre la salud emocional y el impacto en la obesidad dijo: “hay que entrenar a los chicos en emociones. No implica gastos adicionales en las escuelas; hay manuales sobre eso. Mucho en la Argentina tiene que ver con el hambre emocional. Se busca comer para llenar vacíos emocionales”.

Finalmente remarcó: “Hasta que no logremos la ley, las personas deambularán. Hacen falta leyes para que la gente lo tome en serio”.