Según explicó el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, se denomina grooming a la acción deliberada de un adulto de acosar sexualmente a un niño, niña o adolescente mediante el uso de Internet, a través de comunicaciones electrónicas, telecomunicaciones o cualquier otra tecnología de transmisión de datos como las redes sociales, las páginas de internet o las aplicaciones de mensajería como Whatsapp.

Asimismo, aseguró que muchas veces se realiza usando una identidad falsa y creando un vínculo de confianza, que puede ser difícil de reconocer como violencia en un primer momento. También puede ser alguien conocido del círculo íntimo, o un desconocido que no oculte su identidad.

Para prevenirlo, recomendó:

-Hablar cotidianamente con las infancias y adolescencias sobre el uso que hacen de internet, sus hábitos, preferencias y preocupaciones. La charla debe ser lo más distendida posible, sin focalizar en lo negativo ni dejar de lado lo bueno y divertido que tienen las tecnologías.

-Dialogar sobre la importancia de evitar el contacto con personas desconocidas en internet, aclarando que si eso ocurre es importante que avisen a personas adultas de confianza para que acompañen la situación.

-Configurar la privacidad en todas las cuentas en redes sociales tanto de los chicos y las chicas como de las personas adultas cercanas que puedan compartir información sobre ellos y ellas.

-Charlar y reflexionar en familia y comunidad sobre el tipo de información pública o privada que compartimos con personas conocidas o desconocidas en internet.

-Fortalecer la educación sexual integral en los entornos en los que participan las infancias y adolescencias, para compartir información pertinente, precisa, confiable y actualizada, y promover actitudes responsables ante los vínculos con las demás personas, así como enseñar cómo pedir ayuda.