En ese sentido, aseguró que “logramos reducir el déficit que recibimos en el mes de diciembre, vamos a seguir trabajando en ese camino con la convicción de que una gestión seria y responsable es posible aunque sabemos que la situación económica del país nos genera la misma incertidumbre que tienen las familias en sus hogares”.

Pese al trabajo de saneamiento de las cuentas públicas, desde el Ejecutivo Municipal aseguraron que el déficit de $287 millones que arrojó el primer semestre del año se explica a partir de la caída de la recaudación producto de la recesión económica, la caída en los despachos de piedra y cemento que afectaron el cobro del derecho de explotación de canteras, como también la responsabilidad de cancelar los pagos de redeterminación de obras y servicios por $600 millones que no fueron atendidos oportunamente por la gestión anterior.

“Este déficit semestral se explica a partir de la caída de los ingresos de recaudación, muy por debajo de la inflación interanual, alcanzando un 211% de incremento en los ingresos corrientes en comparación al 276% que publicó reciente mente el IPC del INDEC”, aseguraron desde el Municipio.

Al mismo tiempo, el intendente remarcó que “la caída de actividad económica, y la paralización de la obra pública, ha repercutido de manera significativa en el principal recurso municipal como es el derecho de explotación de canteras. En lo que va del año se declararon un 32% menos de toneladas de cemento respecto al mismo periodo del año anterior, y un 44% menos de piedra granítica”.

En el informe de situación económica y financiera que el Municipio presentó recientemente, se destaca que respecto a los gastos corrientes, se registraron incrementos muy por encima de la inflación, tal el caso de los medicamentos adquiridos para el sistema de salud que experimentaron variaciones cercanas al 700% interanual, y en el item compra de alimentos de Desarrollo de la Comunidad se registró un incremento superior al 500%, relacionado al aumento de los precios y vinculado también a un mayor nivel de asistencia a la comunidad ante la crisis económica y social.

Cabe remarcar que el déficit semestral informado contempla más de $600 millones de redeterminaciones de contratos de obra y servicios del año 2023 que no fueron atendidas oportunamente por la gestión anterior y que se transformaron en un déficit oculto que debió afrontar el Municipio de Olavarría.

Por último, en el caso del personal, se expresa que en dicho informe semestral se incluyen al 30 de junio los sueldos y aguinaldo abonados el último mes con el aumento paritario acordado como también el incremento del 700% en el caso de las bonificaciones por presentismo y puntualidad y el pago de bonos de enero a mayo, para sostener el poder adquisitivo de los trabajadores en un contexto inflacionario.