NA/ Este menor ritmo de inflación estuvo impulsado una suba del 2,2% en los alimentos, que compensó, en términos estadísticos, los aumentos del 5,1% en las tarifas de transporte, del 5,6% en indumentaria - vinculado al cambio de estación -, 4,3% para electricidad, gas y agua, entre otras.

En este contexto, el ministro de Economía, Luis Caputo, dijo el pasado domingo que la inflación “llegó a un dígito en abril; en agosto la mayorista fue 2,1%; y el dólar está más abajo que cuando llegamos. Lo importante es que claramente la tendencia inflacionaria es hacia abajo, y es natural que así sea”.

El funcionario, en declaraciones al canal de noticias LN+, también dijo que “en la medida que hay menos inflación, hay más estabilidad. Eso genera mejores expectativas económicas. Con un marco macroeconómico estable, las inversiones empiezan a venir. De hecho, ya lo estamos viendo”.