“Este jueves, los medios locales reflejaron declaraciones de los directivos de APEBA (Federación de Cooperativas de Prestadores Eléctricos de la Provincia de Buenos Aires) donde se alerta sobre la situación crítica de las Cooperativas, entre ellas, Coopelectric”.

“Ante estas afirmaciones, quienes integramos la Lista Verde de Coopelectric reafirmamos nuestro rechazo a las viejas prácticas de la gestión de Coopelectric: cobrarles la electricidad a los usuarios, pero no pagar ellos la que le compran a CAMMESA. Esta situación mantiene a la cooperativa local atada a una deuda impagable, que pretende que el Estado pague. No quieren pagar lo que deben”.

“Ahora bien, ya sabemos que CAMMESA presenta un plan de pagos, pero, para ello, será necesaria una Ley, que va a convalidar estas prácticas fraudulentas: la del que compra, revende, pero no paga. Esto iría en contramano con la actual política nacional de terminar con los subsidios y de que el Estado, con la plata de la gente, pague por la ineficiencia y las malas decisiones de los empresarios, sean cooperativas o sociedades anónimas”.

“Un buen ejemplo de la mentalidad de los dirigentes es que APEBA ya anticipa que no van a pagar el plan que se les ofrece desde CAMMESA. ¿En qué momento se volvió natural no pagar lo que se debe? Están tan acostumbrados a los manejos turbios que ni siquiera se percatan de que lo que dicen es una barbaridad, ajena a todo criterio razonable, legal y ético”.

“En esta línea, los que manejan Coopelectric desde hace más de 30 años eliminaron esta deuda de su balance, en una decisión unilateral y arbitraria: hicieron de cuenta que no existe”.

“El pedido de Coopelectric para que la Provincia les pague lo que deben ya fue rechazado por el OCEBA (Organismo de Control de la Energía Eléctrica de la Provincia de Buenos Aires), así que ya sabemos que no existe como alternativa. También sabemos que lo que piden es que les autoricen más aumentos, para que los usuarios paguen un dinero que, al parecer, cae en saco roto. No se paga la electricidad que distribuyen y no invierten en mantenimiento”.

“Por eso, por todo lo que venimos denunciando hace años, estamos convencidos que es hora de un cambio de mentalidad, de transformar la manera de gestionar las cooperativas con eficiencia, eficacia y, sobre todo, con honradez, para beneficio del usuario y no para el negocio personal de los dirigentes”.