Efectivos de la policía de la Provincia que llegaron desde Morón, trabajaron en el predio del barrio Cuarteles, verificando más de 3500 vehículos, sin hallar anomalías.

Se observó una importante cantidad de policías y las tareas demoraron ese tiempo, debido a la extensión que posee el desarmadero, que es propiedad de Hugo Fayanás.

Según pudo saber LU32, la clausura provisoria se da por falta de un libro que lleva el registro de los vehículos ingresados, que exige la Ley provincial 13081.

Por otro lado, la ley nacional 25.761 (que regula el funcionamiento del Registro Único de Desarmaderos y Actividades Conexas), obliga a colocar stickers en algunas autopartes. Ante la detección de la falta de algunos en ellas, fueron secuestradas.