Briscioli reconoció que lo vivió con “sorpresa, no lo conocíamos tanto, en estos días se habló tanto de quiénes son los favoritos”.

El cura local se mostró vinculado ya que se confiesa como un “gran devoto y estudioso de San Agustín desde los 15 años, tengo 45, voy a cumplir 46, así que hace años que tengo una gran amistad con San Agustín, así que me emociona”. El párroco explicó que en esta línea de pensamiento el recientemente elegido sumo pontífice “es un hombre formado, celebrado, que meditará mucho todas las cosas, con amor por la teología, pero a la vez no es solo eso, parece que es un hombre que tiene experiencia pastoral, cercano a las personas, que es lo que también se espera de un Papa”.