Los cursos forman trabajadores en operador de informática de oficina, reparador de muebles y carpintería, mantenimiento de edificio y electricidad doméstica, tapicería, aparado de calzados y práctica en huerta.

El curso de aparado de calzados, a cargo de la instructora María Eugenia Pérez, tiene como objetivo que el alumno pueda realizar un calzado desde el principio hasta su terminación. Para ello utilizan maquinas de coser, diferentes hormas para diseñar (bajos, con taco, acordonados, alpargatas y sandalias), suelas, hilos, pegamento y moldes. Juan es estudiante del curso de aparado de calzado y no tenía experiencia en el oficio, cuenta que eligió el curso porque “el calzado es lo más necesario para todos. El oficio me brinda la posibilidad de tener un trabajo cuando esté en la calle y eso me motiva”.

Daniel, asiste al curso de reparador de muebles y carpintería, tiene dos hermanos carpinteros y proyecta trabajar con ellos: “mis hermanos se asombran por las manualidades que hago y me  ofrecieron trabajo.  
Esto me sirve para hacer algo bueno”. El instructor Daniel Spinella lleva adelante este curso buscando que los estudiantes sepan usar las herramientas de una carpintería, como para que al salir en libertad puedan emplearse en relación de dependencia.

El curso de tapicería busca formar a los detenidos en el uso de las máquinas rectas, porque su manejo es la base del oficio para poder armar las piezas. Se trabaja para realizar desde un simple almohadón hasta encargues más sofisticados como tapizar un juego de living o reparar asientos de automóviles. El proceso de aprendizaje va desde lo más simple a lo más difícil. Se trabaja con tela, cuerina, goma espuma y maquinas de coser, por lo cuál apunta a que el trabajador se emplee en un taller ya montado.
“Tuve el llamado de un ex privado de la libertad que me agradeció por lo aprendido en el curso, tiene su propia tapicería. Había comprado las herramientas y tenía un negocio. Otra experiencia que tengo con la inserción de mis alumnos me llega por un amigo, Oscar. El es un tapicero que se mudó a Capital Federal en busca de trabajo. Conoció en  una fábrica de muebles a un muchacho que le dijo `sos de Olavarría,   yo conozco a Alzamendi, desde Sierra Chica y él fue mi instructor.  
Dígale que me case y tengo dos hijas´. Estas son cosas que después de 28 años de trabajo en la unidad gratifican. Cosechar estas historias quiere decir que la batalla no es en vano. Me puse muy contento porque sirvió lo que uno deja en cada uno de los que pasan por el curso de formación profesional”, explicó Santos Alzamendi , instructor del curso.

El curso de operador de informática de oficina tiene el objetivo de preparar a los privados de la libertad para un trabajo administrativo.  
Su instructora, Alicia Dirgan, describe  que aprenden tareas específicas que se pueden utilizar en una oficina o comercio, toda la estructura de cartas comerciales, la elaboración de presupuestos de contratos y la realización de balances. Los programas que se ven con el sistema operativo Windows son Word, Excel, Access y Power Point.  
Pablo asiste al curso y explica “mi familia tiene una panadería, tengo proyectado aplicar lo que aprendo en el taller de informática en el manejo de la panadería. Yo tenía un conocimiento previo en computación desde la calle. Es un aprendizaje más para no quedar afuera de lo laboral. Terminé la secundaria acá. Mi familia esta feliz esperándome, ve que estoy cambiando y capacitándome”.

En el curso de práctica en huerta los alumnos conocen y hacen una huerta. “Siempre les digo que busquen un INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria)  que además de asesorarlos en las dudas que pueden tener, les darán semillas gratuitas y eso para ellos es una ayuda. Pueden cultivar y vender el excedente. Seria una salida laboral autogestionada”, explicó el instructor Benjamín Block.
El director del Centro de Formación, Horacio García, agradeció y destacó la ayuda de la Jefatura de Unidad Nº 2 en la tarea de formar a los estudiantes privados de la libertad como trabajadores, que es motivo de mucho esfuerzo y alegría.