En diálogo con "Olavarría en comunidad", Horacio García recordó que la institución surgió en octubre de 2000 en el ámbito de la Unidad Penal 2. 

En el año 2003 crecieron e incorporaron también a la población de la Unidad 38 y hoy también funcionan en la unidad 27 y la 17 de Urdampilleta. Veinte cursos en distintos oficios funcionan en la actualidad. 

Sobre los desafíos de educar en la cárcel, Horacio no vacila en rescatarlo como positivo y dice "Nadie sabe lo que es estar preso". Además, aunque sepamos que ese oficio no será un modo de vida a la salida de la prisión, el esfuerzo vale la pena. 

La reinserción del liberado es casi nula, estimó, ya que la ley de ejecución penal no se cumple en lo que respecta al cupo de liberados en el plantel del Estado.  A pesar de llevar años en el ámbito carcelario, un dato sorprende a Horacio, y es la edad promedio de los detenidos. "Antes en la Unidad 2 el promedio era 28 años ahora es de 21 años" , señaló el director del CFP 402. 

García explicó que cada instructor se lleva sus herramientas y materiales y los talleres que se desarrollan en la Unidad 2 son: reparación de muebles, operador de PC, tapicería, mantenimiento de edificios, electricista instalador y huerta bajo nylon. En la Unidad 17 de Urdampilleta: huerta, chacinados, electrónica y en la Unidad 27 se brindan cursos de peluquería, bobinados y panadería. En el caso de la 38, aprenden la técnica del telar, soguería, cestería, apicultura, electrónica y huerta.