De este modo quedó inaugurado el conjunto habitacional luego de atravesar un largo proceso social y judicial que concluyó en la desocupación pacífica de las viviendas que estuvieron tomadas durante dos años y medio.

 El evento contó con la presencia del asesor del Ministerio de Infraestructura provincial, Alejandro Vieyra; los representantes del Sindicato Químicos Eduardo Zabala y Vanesa Álvarez; el coordinador de Casa de Tierras Ángel Olaechea Velazco y el Consejero Escolar Jonatan Lupori; además de beneficiarios, vecinos y representantes sindicales.

"Esta inauguración nos da una enorme satisfacción. Ha requerido un intenso trabajo poder concretar este barrio, que estuvo parado largo tiempo y que desembocó en la ocupación de varias viviendas.

Desarmar esa situación fue una prioridad y sólo tengo palabras de agradecimiento para Eduardo Zabala y Vanesa Álvarez del Sindicato Químico, para el fiscal Martín Pizzolo, para todo el equipo del Instituto de la Vivienda, para todos los adjudicatarios por su confianza y también para todos los actores que se manejaron responsablemente en una situación tan compleja" sostuvo González Hueso en sus palabras previas a la entrega. El funcionario marcó además diferencias respecto de la actitud asumida desde el municipio, que bajo el argumento de que el barrio era de la Provincia se desentendió del conflicto "nosotros creemos que una de las causas de la toma es la necesidad habitacional en Sierras Bayas, donde es cada vez más difícil conseguir una vivienda o un lote. Y resolver esto requiere una fuerte política municipal para que los jóvenes que nacieron aquí y quieren volver o hacer su vida en Sierras Bayas puedan quedarse. Pero, además, un conflicto social de esta naturaleza en una localidad en la que todos se conocen no puede ser un tema secundario para el poder político local" concluyó el precandidato a intendente del FPV.

Los beneficiaros de estas primeras seis viviendas fueron Carlos Alfredo Sassano y Patricia Allende, Rodolfo Orlando Cordal y Silvana Edith Cifrodelli, César Ariel Montenegro y Valeria Sosa, Fernando Hernán Farra y Marina Palmieri, María Eugenia Blando, y Juan Manuel Martel y Mariela Alejandra Ardiles.

Luego de la entrega se recorrieron las viviendas, que tienen unos 62m2 y cuentan con dos dormitorios, living-comedor, cocina y baño. Como característica distintiva, estas casas son las primeras construidas por la Provincia con biodigestores, esto es, un sistema de tratamiento de efluentes sanitarios calificado como mejor que los pozos sépticos ya que los tanques tienen mayor resistencia, son autolimpiantes y de mantenimiento económico, herméticos, sin filtraciones y ecológicos ya que no contaminan los mantos freáticos ni el ambiente.

González Hueso destacó también la predisposición de los beneficiarios con quienes se pudo llegar a una solución pacífica "entendiendo que había derechos e intereses contradictorios: el derecho a la vivienda genérico de los ocupantes, y el derecho concreto a esas viviendas de los preadjudicatarios".

Actualmente, de las 24 viviendas en construcción hay seis cuya obra se estima estará terminada para mayo. Además, está pronto a firmarse el contrato por las otras seis casas que estuvieron tomadas durante dos años y medio.

Durante el acto, además, González Hueso hizo entrega de una donación de pelotas y elementos deportivos a Eduardo Flores, quien tiene a su cargo a treinta adolescentes que participan en diferentes categorías del equipo de papi fútbol del barrio Fonavi de la localidad serrana. El conjunto estaba compuesto por tres pelotas “Nassau”, silbato, un juego de conos y una pizarra.