El gremialista explicó que se trata de que llegue al bolsillo del trabajo una gratificación cada vez que pasa de categoría.

Sostuvo que es una deuda de los políticos, pero también de los sindicalistas, de los últimos 60 años, ya que siempre se ha ido emparchando la solución.

Recordó que fue una negociación realizada con la gestión anterior y no fue reconocida a partir del 1 de enero por la actual, pero siguen las negociaciones.

No se animó a hablar de un porcentaje de incremento paritario, ya que el nuevo escalafón tiene, implícito, un aumento salarial.

Por otro lado, Stuppia reconoció que el ingresante al municipio tiene un sueldo de 7 mil pesos, que iba a ser modificado por el nuevo escalafón.

Son sueldos comparables con el Municipio de La Madrid, que tiene unos 900 trabajadores municipales.

Reconoció que también se habla del tema de la municipalización de servicios que actualmente son tercerizados.

José Stuppia resaltó el posible saldo de la “deuda” que tienen los dirigentes nacionales, que no se han unificado aún. Afirmó que a nivel local esto se podría haber dado hace mucho, pero que al haber dirigentes que son “dirigidos” por sus entidades madre en la Nación, se complica.

Vio como bueno que se anuncie la unificación.

Destacó que hace días hubo un encuentro de gremialistas olavarrienses para debatir la suba de precios y servicios, y también esta reunificación.

Señaló que a nivel local hay muchos gremios que responden directamente a sus federaciones o centrales nacionales, que no tienen independencia y no pueden tomar decisiones de esas características.