Según lo informado por Cajén, la carta fue presentada en la Rural este lunes 2.

"Quizás cuando lea esta carta le parezca raro el comienzo pero todo tiene un sentido, y tómelo con el mayor de mis respetos hacia Ud. 
“Cambiemos”  quería significar en general y en nuestra ciudad en particular, dar  vuelta la página, ver otra forma de hacer política, estar cerca del pueblo sin distinción, ser prácticos y ejecutivos, en el hacer de cada minuto y planificar una ciudad para el futuro. No significaba generar conflictos con el ciudadano o –como yo lo veo- desde el ámbito municipal imponer el miedo, la persecución política, la falta de cintura política, el premio a los obsecuentes y alcahuetes, el desprecio a la gente con experiencia en gestión, en una soberbia ignorante que sobresale en todo momento.
Hasta aquí, seguramente algunos estarán de acuerdo conmigo y otros enojados por estos conceptos. Pero ninguno podrá negar que fuimos expulsados de esta forma de hacer política por tener, tanto yo como mi amigo Sergio Sarachu, primero la moral como eje de nuestras vidas, servir al prójimo y no servirnos de él, ser servidores sociales y no caciques arrogantes. Es más, en el caso de Sarachu (echado como un perro, como dijo, habiendo sido un puntal en la campaña para llegar a la intendencia) agregaría que fue con total alevosía, porque tanto él como yo íbamos a molestar por nuestra forma de ser ejecutivos, honestos y dedicados las 24 horas al trabajo. 
Pero, como decimos en el campo,  voy a los bifes: el 14 de este mes, escuchando una nota en Radio Olavarría, donde Ud. Sr. Presidente decía que se habían dado a conocer los pliegos de la licitación para el mantenimiento de los caminos rurales en el Partido de Olavarría, y que los mismos no diferían mucho de los pliegos de la gestión anterior y que eran perfectibles algunas adecuaciones en el futuro.  Decía, en esa entrevista, que no hubo tiempo para confeccionar los citados pliegos.
Y aquí, Sr. Presidente, está su error: porque en el mes de diciembre del año pasado nos reunimos con sus pares para escucharlos sobre las demandas y necesidades del sector, con respecto a cómo veían los productores el estado actual de los caminos y cuáles eran sus deseos.  La verdades es que, tanto yo como Subsecretario de Obras y Servicios Públicos como otros funcionarios que me acompañaron,  nos sorprendimos por los reclamos medidos y objetivos y que nos sirvieron para trazar las líneas fundamentales de nuestro plan para los caminos rurales.
Nuestro plan de acción era simple, con innovaciones sensatas que solamente había que aplicar el sentido común y no la fuerza bruta de una máquina, algo que fue una constante en la gestión anterior.  Se había priorizado el relato y no la acción como corresponde, gastando muchos millones de pesos para entoscar caminos que quedaron en buen estado, pero se descuidó la seguridad, de-
jando las cunetas transformadas en verdaderas trampas mortales. Tal es así que en algunos lugares, como en Durañona, se debió coloca un guard rail. Así nos encontramos hoy con caminos que en su momento estaban bien y hoy por el pésimo sistema de repaso o mantenimiento mal aplicado, el municipio y los productores se van a encontrar caminos agotados no por el uso sino por el pésimo sistema de mantenimiento.
Personalmente, con otro colaborador con mucha experiencia, recorrimos 1100 kilómetros de caminos rurales y nos faltaba el otro 50 por ciento de caminos secundarios de enlace y terciarios, pero nos sirvió para hacer un diagnóstico de lo que se debe hacer y lo que no.
Se debe decir que en nuestro plan, al Partido de Olavarría lo dividíamos en tres zonas de alrededor de 700 kilómetros cada una.
El contrato lo estimábamos en un período de 4 años para que las empresas puedan asumir el compromiso de contar con herramientas nuevas e invertir en maquinaria (con el contrato muchas empresas otorgan créditos para este tipo de máquinas), recuperar la inversión y tener su rentabilidad. 
Además agregábamos en nuestro plan:
1.    Señalizar los caminos con su nomenclatura correspondiente (por ejemplo la ruta vieja 226 tiene la nomenclatura 78 –Olavarría-, 1 –primario-, 11 –número del camino-; agregando las señales en los cruces y adónde lleva ese camino, de manera que el neófito en la materia se pueda guiar con seguridad hacia su destino, en especial servicios públicos como ambulancias, bomberos, policías, etc.
2.    Señalizar los accidentes camineros (por ejemplo camino angosto, puente angosto, curva 90 grados, etc)
3.    Relevamiento total del estado de las alcantarillas y puentes, colocando las cabeceras en todas las alcantarillas que no las tengan, como única forma de preservarlas en el tiempo. Y aquí tengo un ejemplo de lo mal que se maneja el gobierno municipal: el 21 de diciembre de 2015 verificamos la necesidad de reparación urgente del puente ubicado sobre el camino 78-1-158 (camino viejo a Espigas), elevamos el informe y al día de hoy no se ha hecho nada, con el riesgo de derrumbe en cualquier momento. 
4.    Hacer como base fundamental y económica el bacheo de tierra o tosca, según sea el caso.
5.    Desmalezamiento en forma contínua en época de primavera y verano, evitando el achicamiento del camino provocado por las malezas y otorgando mayor seguridad.
6.    Realizar mini fumigaciones controladas en la zona de cunetas, para que surta efecto doblemente positivo, facilitando el escurrimiento del agua y además tener las cunetas limpias nos facilitan el alteo de los caminos cuando se requiera.
7.    Realizar acopio de tosca para la reparación de los entoscados agotados.
8.    Los repasos se limitarían solamente cuando la inspección municipal lo requiera a laempresa, por lo tanto se logra una economía importante al productor. Como información: hoy las máquinas motoniveladoras tienen aplicado en cada una un sistema satelital (GPS), que informa dónde está y si está trabajando. Pero la verdadera inspección es la constatación en vivo por parte de los inspectores municipales, porque las máquinas pueden circular con la cuchilla levantada y facturar por hora, como si estuviera trabajando.
9.    Construir nuevas alcantarillas o puentes para solucionar el flujo de agua que pasa por el sector.
10.    Los alteos, realizarlos con máquinas excavadoras con extracción lateral, pero cuidando que las cunetas queden suaves y no se transformen en una trampa para quienes transitan los caminos, complementando con la o las motoniveladoras que la obra sí lo requiera. También se preveía que si fuera necesario, se transporte el material sobre camión.
El objetivo fundamental de todo lo expuesto era que en cuatro años se empezara a contar con una red vial moderna, acorde a las necesidades de estos tiempos
Es evidente, Sr. Presidente, que por error u omisión no le informaron que con la debida anticipación quien suscribe estuvo reunido con sus colaboradores y con los dirigentes rurales que más cerca han estado en el tema caminero.  De cualquier manera tome esto como un aporte a la institución, porque los hombre pasan y, gracias a Dios, las instituciones quedan.
Con respecto a los nuevos pliegos licitatorios, es evidente que hicieron las más fácil: copiar y pegar lo de la gestión anterior, que de nada sirven. No usaron ni media neurona, y en esto libero al Sr. Intendente, porque para saber de caminos rurales no es necesario pasar por la Facultad, sino poner gente que se haya mojado, embarrado y ahí completarlo con profesionales probos en la materia.
Entienda que desde esos caminos de tierra sale la riqueza que va a salvar este país.
Al leer esto que nadie salga herido, ya que es un aporte para mejorar el destino de nuestra Argentina.
Lo saludo con mi mayor estima"