Las reivindicaciones planteadas por los convocantes son: un salario básico mínimo de 5 mil pesos, asignaciones familiares sin topes, eliminación del impuesto a los salarios, 82% móvil para jubilados, la defensa de la salud y la educación pública, el rechazo a la nuevo Ley de ART (que vuelve a disminuir los derechos de los trabajadores frente a los accidentes de trabajo), el rechazo al trabajo en negro y la precarización laboral en todas sus formas, contra la criminalización de las protestas y la derogación de la ley Antiterrorista.