"Utilicemos dispositivos caseros y reservemos los barbijos para las y los trabajadores de la salud", se aconseja desde la cuenta oficial de Twitter del gobierno provincial.

La obligación rige, también, "en todos los espacios cerrados de acceso público (oficinas públicas, locales comerciales, etc.) dentro del territorio de la provincia de Buenos Aires".

El decreto prohíbe, además, en todo el territorio de la provincia de Buenos Aires, "la distribución a título oneroso o gratuito de las mascarillas médicas o quirúrgicas (barbijos) N 95, o de calidad y características similares o superiores, a cualquier persona que no acredite ser personal de salud, o a personas jurídicas que no tengan por objeto la prestación de ese servicio o su producción y/o comercialización".