En la tarde del martes se reunió por segunda vez la “Mesa Interdisciplinaria para el análisis, estudio y evaluación del uso científico del cannabis para uso medicinal, garantizando y promoviendo el cuidado integral de la salud”.

En el encuentro estuvieron presentes el Presidente de la Mesa, Concejal Germán Aramburu (Renovación Peronista), Lía Oyesqui por el INTA, representantes de la UNCPBA Dr. Marcelo Sarlingo (FACSO- Universidad y Cannabis) Y Dra. Franchi María Luisa (FIO- Universidad y Cannabis), además miembros del CONICET CCT Tandil, Dr. Gastón Barreto (FIO- Universidad y Cannabis) y por último el Prof. Emilio Hurtado fundador y presidente de Cannabis Activa Olavarría.

El inicio de la mesa tuvo una especial referencia a la apertura de sesiones del Pte de la Nación Alberto Fernández, quien instaló el tema en la agenda legislativa, a partir de las inversiones en cannabis medicinal e industrial. En este sentido el presidente Germán Aramburu anunció la incorporación de Darío Fontana, en representación del Laboratorio de Producción Pública de Medicamentos de Olavarría.

Por otra parte, los presentes en la reunión del martes coincidieron en la necesidad de pensar políticas locales que logren contener la realidad actual, pese a que la nueva reglamentación está vigente, no se ha implementado un registro de cultivadores  y si bien se esperan novedades, la mesa considera que no pueden quedar por fuera de la discusión el autocultivo y el autoabastecimientos, dos demandas urgentes en un colectivo social que históricamente fue y es criminalizado por la tenencia y el consumo.

En relación a este punto, Emilio Hurtado (Cannabis Activa) hizo referencia a la importancia de que la Mesa expida y articule con dos áreas primordiales: las fuerzas de seguridad y la justicia.

En otro de los temas conversados y de mayor desarrolló, fue el trabajo en diferentes propuestas de acción: Elaboración de una Ordenanza que faculte la posibilidad de crear un registro municipal de cultivadores, y la articulación con el ámbito de salud privada (Círculo médico) para el desarrollo de capacitaciones respondiendo a las demandas del área.

Los aportes de Marcelo Sarlingo representante de la FACSO permitieron pensar al menos tres instancias para ese registro: los usuarios, las asociaciones y los organismos científicos. El primer grupo incluiría a todas las personas que hacen un uso medicinal de los productos derivados del cannabis, con autorización médica, accediendo por importación, compra o auto cultivo. La propuesta ya está en marcha.

Para cerrar se determinará la necesidad de pensar espacios de capacitaciones que sean dinámicos e interesantes para quienes hoy son actores claves en el área y demandan información científica y segura. Este último punto, se trabajó en articulación con el área de salud privada representada por Ramiro Aramburu del Círculo médico, quien coordinará la recuperación de las demandas principales de los profesionales de la salud.