Los investigadores policiales destacan que hubo meses de trabajo previo, con inteligencia y análisis de comunicaciones, que pudieron determinar que un conocido delincuente azuleño, alojado en la unidad carcelaria, operaba el negocio de venta de cocaína y marihuana.

En mayo hubo allanamientos en domicilios de Azul y en la cárcel de Urdampilleta.

Este miércoles 1, la Justicia de Garantías autorizó otros cuatro operativos y se pudo detener a tres mujeres mayores de edad en calidad de partícipes de la operatoria.

La organización, de todas maneras, era liderada por el recluso. El trabajo de campo fue concretado por Personal de la Delegación de Drogas Ilícitas de Azul.

Las tres detenidas fueron alojadas en esa Dependencia, a la espera de un futuro alojamiento en Unidades Carcelarias.