EDUCACIóN
12 de mayo de 2024
Ingeniería avanza hacia la acreditación nacional e internacional de sus carreras
El primer paso fue el autoexamen de cinco ingenierías. Eso implicó relevar información de 339 asignaturas, 200 docentes, 30 proyectos de investigación, aproximadamente 400 convenios y/o actividades de vinculación de los últimos 3 años, y la actividad de 42 nodocentes. Números que hablan y sirven para medir el impacto en la región, el país y el mundo. Información básica para analizar el cumplimiento de estándares ministeriales con calidad, pertinencia social, inclusión y atendiendo a la mejora continua.
Durante el proceso de acreditación de las carreras todas las dimensiones involucradas en la gestión de una institución como la Facultad de Ingeniería de Olavarría están sobre la mesa. Actualmente, la FIO posee una oferta académica de 10 carreras de grado y pregrado, además de carreras de posgrado, dentro de las que se encuentran las cinco ingenierías en evaluación.
“La enseñanza, como actividad esencial, es atravesada por la investigación, la extensión, la transferencia y la vinculación, lo que permite formar integralmente a nuestros graduados de las carreras de ingeniería que finalizaron recientemente el proceso de autoevaluación en el marco de la acreditación nacional e internacional”, argumenta la Mg. Ing. María Haydee Peralta, decana de la institución tras precisar que en casi 55 años de vida institucional se contabilizan más de 2000 títulos con el sello de la FIO.
Cinco décadas de historia “planificados estratégicamente considerando la calidad, la pertinencia social y la inclusión como ejes prioritarios, que son y han sido nuestro faro. Desde 2017 se cuenta con el Área de Calidad y Acreditación que en esta instancia tuvo un protagonismo particular, junto con Secretaría Académica, para llevar adelante la autoevaluación”, destaca la decana.
Que se respeten los estándares de enseñanza y que haya un monitoreo de carreras tanto dentro como fuera de la institución no es algo nuevo, así lo establece la Ley de Educación Superior 24.521/95, para las carreras cuyo ejercicio pueda comprometer el interés público poniendo en riesgo de modo directo la salud, la seguridad, los derechos, los bienes o la formación de los habitantes, como es el caso de las ingenierías, aclara la Ing. Peralta.
Dentro de la autoevaluación, cada una de las cinco ingenierías hizo su propio autoexamen respecto de estándares de acreditación enmarcados en un nuevo modelo de enseñanza en ingeniería, donde lo sustancial fue poner el acento tanto en las competencias disciplinares como en las habilidades blandas.
En las aulas y el territorio
El saldo de ese mapeo institucional es positivo, y así lo expone la decana cuando remarca que “la formación de los futuros profesionales, con un currículum redefinido a partir de la reformulación de planes de estudio en 2022, atiende la complejidad de la sociedad actual y futura y reconoce asimismo al conocimiento como principal protagonista del desarrollo económico y social, actual y futuro”.Es la tercera vez en 20 años que la FIO pone a prueba sus políticas de formación, investigación, extensión, vinculación y transferencia que inciden en la formación de los profesionales de las carreras de Ingeniería en Agrimensura, Ingeniería Civil, Ingeniería Electromecánica, Ingeniería Industrial e Ingeniería Química.
Las ingenieras Isabel Riccobene (izq.), María Peralta (centro) y Susana Nolasco (derecha) explicaron la importancia de acreditar cinco ingenierías.“La autoevaluación es un corte en el proceso de mejora continua que permite reflejar la calidad de nuestras carreras. Mientras que, la inserción de nuestros graduados en la región, el país y el mundo en estos 55 años de historia institucional certifica la calidad en el territorio”, plantea con orgullo la Ing. Ing. Peralta, decana de la Facultad de Ingeniería de Olavarría. Acaba de cerrar la segunda fase de acreditación nacional y en su escritorio hay cinco tomos que explican la formación integral de los graduados de las carreras de Ingenierías en Agrimensura, Civil, Electromecánica, Industrial y Química. ¿El resultado? Para la FIO es satisfactorio, con metas cumplidas y estándares alcanzados que será evaluado externamente a través de la CONEAU (Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria) y ARCU-SUR para definir la acreditación de las carreras a nivel nacional e internacional. La autoevaluación como primera instancia de la acreditación de las carreras de ingeniería es también una oportunidad de crecimiento institucional, de revisión integral de la gestión y una forma de rendir cuentas a la sociedad de nuestro accionar en la formación de los estudiantes de las carreras de ingeniería, a través de la CONEAU que, como organismo descentralizado del ahora ex Ministerio de Educación de la Nación, debe asegurar y mejorar la calidad de las carreras e instituciones universitarias argentinas con examinación de la calidad de la educación superior.
Números que hablan
Un proceso intenso, minucioso, detallado y complejo que arroja información relevante de la gestión de las carreras de la FIO que permite revisar políticas, trazar acciones y generar un nuevo ciclo de planificación estratégica dentro de la FIO, de los Departamentos Académicos y de las Carreras, indica la Secretaria Académica, la Ing. Isabel Riccobene. Datos cuantitativos y cualitativos que ayudan a poner en contexto y dimensionar la magnitud del trabajo realizado.
“Esas acciones tuvieron impacto positivo para el desarrollo de las dos primeras fases ejecutadas de este nuevo proceso de acreditación de las carreras de ingeniería bajo los estándares de segunda generación, a nivel nacional, y por primera vez a su presentación al proceso de Acreditación ARCU-SUR”, explica la Mg. Ing. Susana Nolasco, directora del Área de Calidad y Acreditación.
La primera etapa interna fue de sensibilización, recolección de datos y carga de información en la Aplicación CONEAU Global/Atenea. Mientras que, la segunda instancia tenía como objetivo la elaboración de un diagnóstico/autoevaluación acerca de la situación actual de las carreras por parte de los propios actores institucionales.
“En lo operativo CONEAU requiere el relevamiento de datos a distintos niveles, Institucional, Unidad Académica y cada una de las carreras en proceso de Acreditación. Esto demandó la activa participación y compromiso de todos los miembros de la Unidad Académica y de la implementación de una logística adecuada”, valora la Ing. Nolasco.
Para ello, el Área de Calidad y Acreditación se propuso generar una metodología que fuera de utilidad no solo para esta acreditación sino para futuras evaluaciones en carreras de grado y posgrado. Por eso, “se elaboraron dos Manuales de Acreditación, uno destinado a los docentes y otro a la guía de autoevaluación de la carrera, y 52 tipos de registros (39 registros de recolección de datos/información y 13 registros de control de carga)”, especifica la ex decana de la FIO. Y agrega que el seguimiento, recepción y carga de la información demandó un “intenso y responsable trabajo de todos los integrantes del Área, quienes contaron además con la activa participación y apoyo de Nodocentes de las diferentes áreas de la Facultad, así como de los equipos docentes involucrados”.
Hoy la Facultad dispone de bases de datos que recopilan información detallada que resultaron “sumamente importantes en el proceso de autoevaluación de las carreras de ingeniería, y que a través del tiempo se han constituido en herramientas fundamentales para tomar decisiones”, describe la Ing. Riccobene.
Para graficar los datos relevados en la primer fase de acreditación cabe mencionar que se vincularon 200 docentes quienes previamente cargaron su CV en el sistema nacional de registro de datos, se relevó información sistematizada de 339 asignaturas, para los últimos tres años se dio cuenta de 140 convenios con empresas e instituciones públicas o privadas, 30 proyectos de investigación y desarrollo y 249 actividades de vinculación con el medio, 42 Nocentes, 20 inmuebles donde se desarrollan los diferentes espacios curriculares, aproximadamente 1200 estudiantes y 460 graduados en los últimos diez años de las cinco carreras de ingeniería. Son números que hablan y que confirman el impacto que tiene la FIO en la región y más allá de sus fronteras.
El complejo análisis de toda esta información fue realizado bajo la responsabilidad de los Coordinadores de Carrera, la colaboración de los Consejos de Carrera (integrados por docentes, estudiantes y graduados) y los Directores de Departamento.
El futuro es hoy
El principal desafío institucional es “adelantarnos al futuro”, “somos formadores de profesionales que inician hoy su tránsito por la Facultad como estudiantes y que se desempeñarán como profesionales dentro de 5, 6, 7 u 8 años, para lo cual les habremos ayudado a desarrollar las competencias necesarias para insertarse al mundo laboral atento a la rapidez en los cambios científico tecnológicos”, asume Peralta.
“Pudimos cumplir con las metas proyectadas a este momento, pero aspiramos a seguir mejorando y avanzando; esto dio pie a los nuevos planes de estudio de las carreras de ingeniería”, resalta Riccobene, convencida de que la reformulación de los mismos fue un acierto. Uno de los indicadores que se analiza es la permanencia de los ingresantes a las carreras, observándose una menor deserción y una mayor tasa de aprobación; resulta una primera señal positiva pero el monitoreo es continuo. La mejora continua está en nuestra política de gestión, observa la Secretaria Académica.
La Mg. Ing. Nolasco sostiene que la “promoción de la calidad y la mejora continua en las instituciones universitarias puede hacer mucho para asegurar el aporte adecuado de la Universidad a la sociedad y contribuyen a fundamentar la propia legitimidad de las instituciones de educación superior. La garantía de la calidad es una función esencial de la enseñanza superior”.
La FIO tiene un sentido de pertenencia regional que incluye y al mismo tiempo trasciende lo académico. El compromiso y la participación de cada uno de los miembros de la comunidad FIO permitió avanzar sin dificultades hacia una nueva fase en el proceso de acreditación nacional e internacional de sus carreras de ingenierías, señalan Decana, Secretaria Académica y directora de Calidad y Acreditación, orgullosas de ser parte de una institución prestigiosa, de puertas abiertas, que ofrece calidad y que siempre va por más.