Recordó que cuando quedó formalmente al frente de la Sociedad de Fomento expresó su preocupación al Municipio por el estado del edificio en que funcionan. Concretamente, tiene el techo roto, faltan ventanas y tienen problemas con la instalación del gas.

“Son los mismos vecinos del barrio que se me meten adentro de la Sociedad Fomento por el techo”, graficó. Hace unos días fue convocada por la Municipalidad y se le comunicó que persiste una denuncia en su contra por no abrir el establecimiento, desde hace seis meses. El documento fue recibido por el Municipio el pasado 20 de noviembre. “No se puede porque no está en condiciones el edificio”, sostuvo. Pidió además saber quiénes la denunciaron.

“Estamos en lucha porque tengo la denuncia y no hay actividad, pero tampoco ellos me dan una solución. Yo asumí en abril y recién en diciembre me llamaron”, deslizó.

Comentó además que la situación se complica aún más, porque tienen una cuota mínima de 50 pesos, y que no les entra fondos de ningún lado. A su vez, contó que el barrio Dorrego viene atravesando episodios complejos relacionados a hechos delictivos.

“Tenemos miles de proyectos, pero solos no podemos”, se lamentó.