“Es una ola de calor típica del año, no presenta ningún tipo de anormalidad al tipo de fenómeno meteorológico que estamos atravesando. Un sistema de alta presión produce condiciones de estabilidad de cielos mayormente despejados y que además favorece la circulación de vientos del norte y del noroeste durante un par de días”, explicó.

En relación al fenómeno en el centro de la provincia de Buenos Aires, mencionó que “puede haber varias localidades que no lleguen a tener ola de calor porque han estado con cobertura nubosa, como por ejemplo localidades al sur de Olavarría que al llegar a los 30 o 32 grados han tenido un descenso de temperatura”.

“Esto indica que Olavarría va a estar ahí al límite de decidirse como ola de calor o no teniendo en cuenta las temperaturas de miércoles y jueves, porque tienen que ser tres días consecutivos y mañana martes se esperan temperaturas entre 18 y 34, el miércoles 21 y 36, pero ya luego el jueves baja la temperatura máxima porque estarían entrando tormentas”, añadió.

En ese sentido, describió las características de la ola de calor. “La persistencia durante tres días de mínimas y máximas por encima de cierto umbral climatológico dependiendo del punto en el que uno está ubicado”, indicó.

Consultado sobre la proyección de temperaturas para lo que queda del verano, dijo que se espera que sean muy levemente superiores a las normales, con precipitaciones normales. Es decir, que no se anticipa un verano ‘sofocante’.