NACIONALES
16 de julio de 2025
Ley de Etiquetado Frontal: ‘Estas modificaciones generan una regresión en la salud pública’

Al aire de LU32, la Lic. en Nutrición Estefanía Alsina, repasó cuáles son los principales cambios que se han introducido a la "Ley de Etiquetado Frontal", y cuál sería su impacto en las góndolas y en el día a día de los argentinos. Señaló que dichas modificaciones implican un "retroceso" en el abordaje de problemáticas relacionadas con la alimentación en Argentina.
"Para recordar, esta ley se promulgó en octubre 2021 y fue reglamentada a partir de 2022, y ya en los tres años hay ciertas modificaciones que generan una regresión y un debilitamiento de la Ley de Promoción de Alimentación Saludable (conocida coloquialmente como 'Ley de Etiquetado Frontal')", sentenció la doctora y Licenciada en Nutrición, Estefanía Alsina.
En cuanto a los principales cambios implementados a partir del año pasado, Alsina se refirió de forma puntual a dos grandes modificaciones:
"Ahora el cálculo de los nutrientes críticos se realiza a partir de lo que es añadido al producto, lo que es intrínseco al producto no se calcula en el sello. Entonces, por ejemplo, un queso que tenía tres sellos hoy va a tener un sello. Es decir, un queso que tiene como nutriente intrínseco exceso de grasas saturadas, exceso de grasas totales y si tiene agregado de sodio va a contener solo el sello de exceso de sodio. Se quita el agregado del sello de grasas totales y grasas saturadas y no se refleja en los sellos. El único sello sería el de exceso de sodio", explicó Alsina.
"Una salchicha también, en vez de tener tres sellos va a tener uno, el de exceso de sodio. No es que cambie la formulación del producto, sino que cambia el cálculo. Entonces vamos a ver menos sellos en los productos pero eso no quiere decir que son más saludables", añadió la nutricionista.
El segundo cambio importante introducido, según la profesional, es el de los "claims" (declaraciones) nutricionales:
"En los productos que tenían sello, por ejemplo, no aparecían las leyendas 'fortificado en', o 'light', o 'reducido en', porque estaba prohibido. Hoy se puede usar. Entonces, por ejemplo, podemos ver ese mismo queso, en el que desaparecen los sellos de exceso de grasas, que va a tener un sello de exceso de sodio, pero va a decir light. Entonces eso también confunde aún más. Porque vamos a tener menos sellos y más claims nutricionales", expuso Alsina.
En sintonía, Alsina hizo foco en otro de los cambios realizados a la ley, el cual desregula la publicidad de los alimentos procesados dirigidos al público infantojuvenil:
"También se debilitó el tema del marketing de alimentos. Se redujo la edad de 18 a 16 años. Ya se están viendo en las publicidades, y en las publicaciones en redes sociales, a niños y adolescentes y adultos en lo que es propaganda, publicidad de alimentos con sellos. Eso también se debilitó", aclaró la nutricionista.
En relación a este punto, Alsina fue contundente respecto a lo que se había logrado con la ley y ahora está "en peligro":
"Hubo reformulación a nivel componentes de un montón de productos para quitar el sello y la publicidad era haciendo énfasis en que el producto era sin sellos. Que eso está buenísimo, porque hubo reformulación de productos. Ahora no vamos a saber si esa reformulación va a continuar o no, en realidad. Porque el cálculo de sellos se modifica y la declaración jurada ya no es obligatoria", señaló Alsina.
En cuanto al consumo de este tipo de alimentos, los procesados, la nutricionista recomendó que se consuman en la menor cantidad posible:
"Nosotros como nutricionistas lo que recomendamos es el menor uso de alimentos ultraprocesados. Nosotros siempre lo que recomendamos más allá, en realidad, el sello o el octógono es como una alerta. Es como algo rápido de ver. Pero luego uno tiene que ver la lista de ingredientes de ese producto. Sabemos que la lista de ingredientes está en orden de creciente. O sea, el primer componente del alimento es lo que tiene mayor cantidad. Y cuando vemos una lista muy larga, sabemos que es un producto ultraprocesado que tiene muchos ingredientes, muchos aditivos", explicó Alsina.
"Ahora que hablo de aditivos, otra de las cuestiones de modificación de la ley es lo que es la leyenda que decía que contiene edulcorantes. Si ese edulcorante, por ejemplo, se agrega al producto como un aditivo y no como poder edulcorante, también se puede sacar esa leyenda", aclaró la nutricionista.
"Entonces, lo que nosotros aconsejamos es el menor consumo de alimentos ultraprocesados. Si uno consume un alimento ultraprocesado, tratar de leer la lista de ingredientes, tratar de buscar un alimento que tenga menor cantidad de ingredientes posibles y tratar de ir a la base, a las raíces, y consumir alimentos lo más natural posible", concluyó Alsina.
Por último, Alsina aseguró que la Ley de Etiquetado Frontal original estaba siendo “muy útil”, pero que estas modificaciones implican un retroceso en el abordaje de la obesidad como problema de salud pública:
"Fue como una alerta a los consumidores, el tema de los sellos. La Federación Argentina de Graduados en Nutrición (FAGRAN) ya había hecho estudios, en los que demostró que había disminuido el consumo de productos ultraprocesados, así que yo creo que esto es una regresión", indicó la nutricionista.
"El sobrepeso y la obesidad en la Argentina es un problema de salud pública muy importante. Sabemos que tenemos un 70% de sobrepeso y obesidad en mayores, y en menores un 40% de sobrepeso y obesidad. O sea que es un problema de salud, de salud pública, y esto venía como a ser una política de salud pública, que hoy se debilita", concluyó la Lic. en Nutrición Estefanía Alsina.
CB