LOCALES
17 de abril de 2012
Crimen de Sánchez: el menor prófugo tiene frondosos antecedentes y había sido liberado por la Justicia
En las últimas horas la Policía ha intensificado las tareas para dar con el menor de 17 años que se encuentra prófugo acusado de haber participado del crimen del vecino del Barrio Facundo Quiroga. El prófugo tiene frondosos antecedentes y distintas medidas dispuestas por la Justicia le permitieron estar en libertad. En 2011, y luego de ser detenido, la Jueza Beaucamp (foto) ordenó su liberación. Hasta este martes hay dos detenidos, un mayor y un menor. Foto: El Popular.
Personal de la Comisaría Segunda se encuentra abocado por estas horas para lograr la detención del menor de 17 años que aún se encuentra prófugo luego del crimen del vecino del Barrio Facundo Quiroga II, Rodolfo Enrique Sánchez.
Se están siguiendo distintas pesquisas aunque es inocultable la molestia de los investigadores por el tiempo que se tomó la Fiscalía del Fuero Penal Juvenil para ordenar la detención del joven que en los próximos meses cumplirá 18 años.
“Si la orden de detención hubiese salido el primer día quizás hoy la historia sería distinta”, dijeron voceros cercanos a la investigación.
La policía trabaja de manera incansable para poder lograr la detención y frente a esto se analizan distintas hipótesis – incluso – una que sostiene que el menor habría sido ayudado para fugarse de la ciudad.
La historia del menor tiene distintos comportamientos vinculados a hechos delictivos del menor que hoy se encuentra imputado en el homicidio de Sánchez aunque aún no se sabe con qué grado de responsabilidad.
El menor fue institucionalizado en la “Casa del Adolescente” de Olavarría en el año 2008 –cuando tenía 13 años – y desde allí comenzó un periplo por distintas instituciones con intervención de distintos estamentos del estado.
Según pudo saberse el menor sólo estuvo en mencionada institución hasta octubre de 2008 siendo restituido a su domicilio. Desde esa fecha, reza el contenido informativo conocido este martes, el adolescente comenzó a reincidir en conductas como: consumo de alcohol, marihuana y estupefacientes, entradas en la comisaría debido a delitos menores tales como: robos, disturbios, violaciones de domicilio, tentativa de hurto in fraganti delito.
Más adelante en el tiempo, la información que conoce la Justicia indica que el menor tuvo “una escalada muy marcada de enfrentamiento con los vecinos”.
Uno de esos episodios incluyó una amenaza a un vecino y con una escopeta gatilla a éste sin que impactaran los disparos. Los organismos estatales competentes determinaron que era necesaria su “protección” y se determina que junto a un familiar el menor abandonará Olavarría.
Esto duró algunos meses dado que el joven regresó a la ciudad y se definió como “un líder de los adolescentes del barrio”. Ahí vuelven a repetirse hechos delictivos e incluso problemas acarreados por el consumo de los estupefacientes.
Las situaciones se fueron repitiendo y en 2010 hubo un agravamiento en el comportamiento del joven.
En esos meses los organismos estatales competentes informan de dicha situación, entre otros, a la Asesora de Incapaces de Olavarría, Dra. María Angélica Fittipaldi, a la Jueza del Juzgado de Responsabilidad Penal Juvenil Dra. María Cristina Beaucamp y al Director del Centro de Referencia Dr. Santiago Zafora.
Muchos episodios incluían fuertes enfrentamientos con personal policial y distintos hechos vinculados con lo delictivo.
La información a los organismos judiciales se determinó dado que se consideraba, desde el Servicio Local de Promoción y Protección de los derechos del niño, que la vida del adolescente “estaba expuesta a situaciones de extrema gravedad en forma cotidiana”
Luego se fueron registrando distintos episodios que determinaron que el Juzgado de Familia de Olavarría, ante un pedido del Servicio Local, dispusiera la internación del menor en Cumelén. Al día siguiente de la internación se produce una fuga y posteriormente se restituye al menor al centro asistencial.
Días más adelante el menor nuevamente se fuga y los intentos para poder restituirlo a la Comunidad Terapéutica son infructuosos.
Los últimos datos conocidos indican que en agosto de 2011, luego de varios episodios vinculado con lo delictivo, el menor queda detenido y alojado en el centro de contención de la ciudad de Tandil.
Al intervenir la Jueza Beaucamp dispuso “dejar sin efecto la prisión preventiva, disponer la inmediata libertad del joven y que su tratamiento tutelar se realice en su domicilio junto a sus padres”.
Por último se indicó que la única intervención solicitada por el Centro de Referencia fue la incorporación del joven al Programa Envión, la misma fue denegada, por no considerarla una estrategia válida para este joven.