Explicó que no comparte lo que afirman desde la Cámara Empresaria respecto a que hay muchos locales vacíos en el centro de la ciudad.

Indicó que si uno recorre las calles, ve que nos son tantos los locales que hay desocupados.

Por otro lado, manifestó que hay que muchos sistemas de ajuste en los locales tiene que ver con la actualización del precio de la mercancía con la que trabajan.

Notararigo negó que los martilleros sean formadores de precio y afirmó que solo son consejeros u orientadores de los propietarios en la relación con el inquilino.

Reveló que la mayoría de las veces, los propietarios ya saben lo que van a pedir cuando van a renovar un contrato.

Manifestó que lo que ellos quieren es no queden ni locales, ni viviendas sin alquilar o desocupadas.

También descartó que sean los martilleros los que dolaricen o pesifiquen un contrato.

Volvió a manifestar que es el vendedor quien lo decide.

De todos modos sostuvo que en Olavarría se vende mucho en pesos, aunque con esta escalada se ha producido una retracción.

Por último, expresó que no hay casas para vender, ya que no se construyen.

Consideró que esto sucede desde hace muchos años y que los inversores compran departamentos.

Concluyó reiterando que faltan casas individuales para vender.