"Es una medida inédita en la historia argentina, que busca incentivar a las personas privadas de su libertad a capacitarse para lograr una reinserción social plena", explicó Alak, que este lunes iniciará junto a su par de Educación, Alberto Sileoni, el ciclo lectivo 2012 en las cárceles federales, donde estudia casi el 65 por ciento de los internos.

Los ministros estarán a las 11.30 en la Unidad Penitenciaria número uno de Ezeiza, donde comenzará a aplicarse un programa de incentivos que reduce las penas de los internos que estudian a medida que van aprobando diferentes ciclos de la enseñanza.

"La ley 26.695, sancionada por el Congreso de la Nación en julio del año pasado, modificó el régimen de ejecución de la pena privativa de la libertad", explicó Alak y precisó que "el artículo 140 de esa norma fija reducciones de hasta cuatro meses,

acumulables hasta alcanzar un máximo de 20 meses, en las condenas de los internos que completen y aprueben satisfactoriamente total o parcialmente sus estudios primarios, secundarios, terciarios, universitarios, de posgrado o trayectos de formación profesional o equivalentes".

En un comunicado, el funcionario nacional destacó que "se trata de una medida importantísima que reconoce el esfuerzo de los internos que, con su decisión de estudiar y capacitarse, apuestan a reinsertarse en la sociedad como ciudadanos capaces de ejercer todos sus derechos y también todas sus obligaciones".