En una recorrida realizada por LU 32, pudo verse trabajando solo a dos máquinas y un camión.

El trazado se encuentra habilitado y finalizado desde Chillar, hasta la mitad del mismo aproximadamente.

Luego los vehículos no deben continuar transitando por el mismo, ya que desde ese punto hasta Olavarría, falta terminar algunas “obras de arte”, entre las que se cuentan alcantarillas y desagües.

Para trabar la circulación, la empresa ha impuesto montículos de tierra por sobre el trazado, en los que se registran algunos desvíos, que no están avisados y que seguramente han sido improvisados por los que deben circular, para ingresar a los establecimientos agropecuarios ubicados a lo largo de la traza.

Desde las esferas oficiales se impone el silencio cuando se consulta por una fecha de habilitación final o incluso por el motivo de la casi paralización de la obra.

Tampoco la empresa Dos Arroyos ha respondido a las insistentes consultas de LU 32 para conocer el estado de situación de la obra.

Extraoficialmente trascendió que existiría un atraso en los pagos que el Ministerio de Infraestructura que conduce Julio De Vido, a través de la Dirección de Vialidad, debería efectuar.

Recordemos que en un primer momento la obra se había calculado en unos 73 millones de pesos, pero con el correr de los años el presupuesto se elevó hasta superar los 120 millones.

Con todo, quienes se arriesguen a circular por la traza en los kilómetros que están cerrados al paso y que los usos y costumbres han abierto, deben hacerlo con un cuidado extremo. Aunque desde Chillar, el camino está habilitado.