La Ing. Peralta dirige una institución con 54 años de historia que hoy es habitada por casi 1200 estudiantes y que a la vez se multiplica en graduados que llevan el sello de la FIO más allá de las fronteras. “Siempre atentos a las demandas del medio reafirmamos nuestro rol social revalorizando la misión institucional ajustándola a las problemáticas del área de influencia”, planteó la decana.  

“Los cambios que se plantean para nuestra política institucional son muchos y rápidos y nos requiere capacidad de adaptación”, apuntó la Ing. Peralta, convencida del papel protagónico que juega la Facultad de Ingeniería de Olavarría tanto en lo educativo y comunitario como a nivel productivo y socio-económico.

 En ese contexto, y tras el impacto de la pandemia, en 2022 “se realizó la revisión y modificación de los planes de estudio, que ponen evidencia un nuevo modelo de formación en las carreras científicos tecnológicas, un modelo de aprendizaje centrado en el estudiante. Ello conlleva, entre otras cosas, la readecuación de los espacios de trabajo que permitan el desarrollo de metodologías de enseñanza-aprendizaje diferentes, con actividades relacionadas con el saber hacer. Estos planes se implementaron en el presente 2023, y se están realizando los primeros análisis relacionados con el impacto en los indicadores de aprobación, retención, etc.”, explica Peralta, que transita su tercer año como decana.

A esos retos se le sumó, este año, la acreditación de carreras que incluyó un proceso de autoevaluación a partir de “recopilación de información y registros dando respuesta a los requerimientos ministeriales que en este sentido se realizan a través de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU). Fueron meses muy intensos, muy desafiantes, de mucho debate y reflexión al interior de la gestión de las carreras y de la gestión de la facultad, lo cual también fue muy enriquecedor para la planificación institucional. El proceso realizado permite reconocer, agradecer y capitalizar el trabajo de la comunidad FIO”.

 “Si pienso en este año que termina agradezco al equipo, al gabinete, a docentes, nodocentes, estudiantes, graduados, el gran trabajo comprometido realizado con la implementación de los planes de estudio, la autoevaluación institucional y todas las actividades institucionales realizadas que articuladas contribuyen al mismo fin”, expresó.

En otro orden, se refirió a lo que depara el 2024, que llega predeterminado por “la incertidumbre a partir del contexto político. Nosotros definimos el camino, lo planificamos a partir de objetivos claros y sostenidos. Pero esos planes de acción están marcados por el contexto, que no modifica los objetivos pero sí nos rectifica caminos. Siempre ha sido así y la capacidad de adaptación nos permitió llegar a la institución que tenemos hoy”.

El presupuesto universitario será el punto de inflexión dado que siempre ha sido “una herramienta política que tiene el Gobierno y que nos atraviesa, que nos plantea de acá para adelante el escenario de trabajo. Eso hoy es incierto a nivel Facultad y a nivel Universidad”, admitió María Peralta, con la mirada puesta en el cambio de modelo de las políticas universitarias del nuevo gobierno.

“Hay un cambio de concepción de la Universidad en Argentina, aún no hubo anuncios en este sentido. No tenemos claro el escenario 2024. Intuimos algunas cosas, pero estamos expectantes de los anuncios”, reconoció.

En síntesis, “la FIO cierra con balance positivo, según lo planificado” pero con “un escenario incierto que nos exigirá ser más creativos que nunca. Confío en que vamos a poder adecuarnos al escenario que se nos presente el año que viene y estamos dispuestos y comprometidos a hacer lo que haga falta para que la FIO siga estando donde está hoy en la sociedad y siga aportando desde la educación pública”.

PRENSA FIO