En una nota señala que “La Agrupación Vecinalista cree necesario que los Concejales que son los encargados de velar y proteger los intereses y el bolsillo de los vecinos traten el pedido.

Cabe destacar que en épocas de elecciones los concejales y el ejecutivo realmente escuchan a los vecinos, y transitan los barrios, es por eso que se realizó esta petición.

De no tratarse quedará una vez más en evidencia que solo les preocupa el bienestar de una minoría y no la de los vecinos en general: que sólo protegen los intereses de esa minoría que más ganan explotando los recursos de la ciudad y no los intereses del vecino tradicional. Vecino, al cual en cada elección, le van a pedir el voto.

A su vez, en el mismo comunicado se les pidió de forma “urgente” que estudien, analicen y traten una reforma a los artículos 95 y 96 de la ORDENANZA FISCAL Nº 2460/99 para que propongan un cambio en el “método de control” de la liquidación y pago de los derechos a la extracción de esos recursos no renovables, solicitándole que no se efectúe más en base a una Declaración Jurada confeccionada de acuerdo a los totales que arrojan las planillas diarias de producción sino que se establezca un sistema de control real más moderno y riguroso contemplando cada gramo de extracción de arena, piedra, cascajo, sal y demás minerales.

El POT sostiene que el problema más grande que posee nuestra ciudad es la explotación indiscriminada de los recursos no renovables y la falta real de control sobre esas extracciones.

Si el pago del impuesto se efectúa por medio de una “Declaración Jurada” que confecciona la misma empresa ¿quién controla las extracciones de esos recursos no renovables que no se facturan, que no aparecen en las “Declaraciones Juradas”? ¿No es el Concejo Deliberante junto al Ejecutivo local los encargados de brindar las herramientas suficientes para que a la ciudad no les roben sus recursos? El mirar para otro lado ¿los hace cómplices de estas estafas, atropellos y robos?

El problema que está observando Por Olavarría Todos es que no se está planificando una “Ciudad a Futuro”; para cuando esos recursos se acaben y estas empresas emprendan el éxodo masivo de nuestro suelo.

Es por eso, que desde la agrupación, al cumplirse, el sábado 29 de junio pasado, 71 años de la sanción de la primera ordenanza del “Impuesto a la Piedra”, se les solicitó, también a los Concejales, en el mismo pedido, que estudien, analicen y traten de manera “urgente” la posibilidad de crear un “Fondo de Urbanización” compuesto por el 50% (cincuenta por ciento) del “Impuesto a la piedra” destinado a reanudar y reimpulsar el ambicioso proyecto de urbanización, “Plan Lara”, de la autoría del Senador Provincial Oscar Lara (1948) para culminar las obras que quedaron pendientes como la pavimentación de caminos rurales, la adquisición de un helicóptero-ambulancia para el Hospital, entre otros.

Cabe recordar que aún no se sabe con exactitud hacia dónde van esos fondos. Recursos que deben ser destinados para fortalecer las actividades secundarias de la ciudad, para que cuando estas empresas emprendan el éxodo Olavarría continúe creciendo y no se convierta en una ciudad fantasma llena de cráteres.

Olavarría es diferente a otras ciudades. Lo es por las características de su suelo y subsuelo, por la actividad industrial instaladas en todas las áreas, por la ubicación estratégica respecto de los mercados de consumo, y del puerto de exportación (la gran rotonda de la provincia), por la belleza de su paisaje natural.

Olavarría es un centro minero de la provincia de Buenos Aires (se extrae cal, caliza, dolomita, arcilla, arena, laja y pedregullo) y es el mayor productor de cemento a nivel nacional, ya que elabora el 60% de la producción anual total. Olavarría aporta el 60% de la producción de cemento del país; La ciudad del cemento.

Y en la ciudad del cemento el valor de pavimentación de una calle se encuentra entre los más altos de la provincia. ¿Cómo eso puede ser posible?”