“Lo que vamos a hacer es poner una caja en un lugar de la escuela, los estudiantes cuando ingresan a la escuela dejan sus celulares y en el momento en que se retiran de la escuela los pueden ir, buscar y se los llevan. A su vez, lo que le decimos a las familias es que en caso de que se tengan que comunicar con los estudiantes que lo pueden hacer a través de los preceptores”, explicó puntualmente sobre la medida.

Indicó que se aplicó, desde este jueves, solo en tres divisiones que son en las que se viene trabajando en base a estadísticas del primer cuatrimestre. Asimismo, aclaró que la medida es transitoria: “En octubre cuando entregamos de nuevo las pre notas del segundo cuatrimestre, vemos si hay una evolución al respecto”, dijo.

Consultado por las situaciones que registraron, señaló que “lo utilizaban para estar en las redes sociales, para escuchar música, para distintos usos que no son los netamente vinculados con las prácticas pedagógicas dentro del aula”.

Y destacó: “Siempre en educación tomamos decisiones, las vamos evaluando con todos los actores de la comunidad y buscamos lo mejor en términos de acompañamiento de trayectorias y rendimiento pedagógico. Consideramos que esta decisión es la más acertada para estas tres divisiones puntuales donde lo que buscamos juntamente es, que se pueda revertir el rendimiento pedagógico”.

“Cuando uno percibe que el abuso de las tecnologías repercute en poder estar concentrado, uno tiene que tomar determinadas decisiones. Nosotros consideramos que esta es una buena decisión, es transitoria, y en caso de que se revierta la situación, no tenemos ningún tipo de inconveniente de reverla”, concluyó Mogávero.