En las últimas horas se fueron haciendo público algunos detalles del fallo que terminó con la destitución del Dr. Antonio Cayetano Saladino de la titularidad del Juzgado de Garantías Nº 1 de Olavarría.

El fallo deberá ser publicado en los próximos días, completo, en el Boletín Oficial de la Provincia de Buenos Aires según lo establece la Ley 13.661 consta de 100 carillas en donde los miembros del Tribunal es explayan en argumentos para lo que finalmente fue la destitución del Dr. Saladino.

El Presidente del Tribunal y Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires, Dr. Eduardo De Lazzari dice en sus argumentos:” puede advertirse con relación al incidente de excarcelación Gallastegui, una serie de elementos debidamente acreditados que, enlazados entre sí, permiten arribar a la conclusión de que el acuerdo entre Saladino y el abogado Alonso efectivamente tuvo lugar. Eran amigos y tenían permanente contacto, dentro y fuera del Juzgado”

En la argumentación del Dr. De Lazzari y en el Dr. Garavaglia se le da relevancia a la confirmación de la existencia de una reunión en el despacho de Saladino entre el destituido magistrado, el Fiscal Pizzolo y el abogado Marcos Alonso.

La reunión, llevada a cabo días antes de la feria, es detallada en el testimonio que ante el Tribunal brindó el Juez Carlos Eduardo Villamarín.

Dice el Dr. Eduardo De Lazzari “en los últimos días del año, con anticipación a la feria, tiene lugar una reunión entre el Juez, el mencionado abogado y el fiscal Pizzolo (testimonio de Villamarín); el imputado estaba prófugo y es presentado al tiempo en que la causa queda en manos del juez acusado a cargo de la feria”

Pero es otro miembro del Tribunal, el Dr. Garavaglia, el que da algunos detalles más de esa reunión siempre citando la declaración del Juez Villamarín.

Se explica en el fallo, en la argumentación de Garavaglia, se encuentra acreditado que días previos a la feria judicial de enero del año 2010, en el despacho del Dr. Saladino se llevó a cabo una reunión con el Dr. Alonso y el fiscal Pizzolo, justificando a mi criterio un proceder inadecuado y falto de probidad en el desempeño de su magistratura. Al respecto expuso el testigo Villamarín: “yo concurrí el 30, me parece, tipo 12 del mediodía, a su despacho. Llegué a mesa de entradas. Me atendió el secretario, Dr. Sánchez Bruce. Lo primero que me dijo fue: ¿vos también venís a la reunión?. Después de lo que pasó me hizo recordar: `no, ¿qué reunión?. Yo vengo a hablar con Saladino de lo que queda pendiente ¿por qué?` `no, porque están reunidos Marcos Alonso y el doctor Pizzolo con él`”.  

Esto puede vincularse con otro pasaje de la argumentación del Presidente del Tribunal cuando dice: “A todo esto, subsigue la gestión del juez de la causa, en uso de licencia, Dr. Villamarín, quien llama al propio juez y a otros funcionarios, alertando sobre lo que entendía una situación irregular. En esas condiciones, se aprecia que Saladino opta por dar marcha atrás con el propósito inicial, redactando una resolución denegatoria (…) inmediatamente la comunica por correo electrónico al abogado interesado, a quien a renglón seguido le hace llegar un proyecto de recurso de apelación contra el mismo decisorio”.

Al mismo tiempo agrega el Dr. De Lazzari a la hora de argumentar su voto que “se suma asimismo la reprochable actitud de presión ejercida por Saladino sobre los restantes funcionarios que debían actuar en el trámite del incidente excarcelatorio, haciéndolo con la intención de lograr mudar la calificación legal a una figura más favorable al imputado”

En este sentido el Presidente del Tribunal indica que lo anterior fue probado en las audiencias de debate por las declaraciones de la Fiscal Susana Alonso, el Juez Carlos Villamarín y la Oficial María de las Mercedes Turrina.

Por otro lado, otro miembro del Tribunal, el Dr. Máximo Heriberto García habla de la relación de “amistad” entre el ex Juez Saladino y el abogado penalista Marcos Alonso.

Para el miembro del Tribunal esta “amistad” era contraria al lugar de Juez que ostentaba Saladino y lo fundamenta diferenciando la actitud del magistrado con la de su par, Carlos Eduardo Villamarín.

 El Dr. Máximo Heriberto García dice en su argumentación, citando a Diego Alonso, que: “basta rescatar los términos del testigo Diego Alonso en la que hace directa referencia a la relación de su hermano fallecido con el magistrado o a las declaraciones del propio magistrado Villamarín respecto a la relación del juez Saladino y abogados de una de las fiscalías.”

Al mismo tiempo en el voto de García se destaca que el Dr. Villamarín, para diferenciarlo de Saladino, rechazó “invitaciones” de algunas personas mencionadas en la causa.

Ante esto el Dr. García indica: “poco más puede agregarse al contraste entre la probada y fluida relación entre Saladino y el fallecido abogado Alonso entre otras personas y la actitud precavida de un magistrado que ejerce con seriedad su función.”

Al mismo tiempo el conjuez Carlos Garavaglia le otorga un valor importante a la hora de votar por la destitución al testimonio de la Fiscal Susana Alonso cuando esta reconoce haber recibido presiones del ex Juez Saladino para modificar la caratula de la causa Gallastegui.

Garavaglia cita a Susana Alonso cuando ésta dice: “mi criterio era que se trataba de una tentativa de homicidio. Uno de los comentarios que hice referencia en la última oportunidad que declaré aquí fue que continuamente me decía – por Saladino -  `acá hay lesiones graves`. Esa es la presión, pretender que uno comparta ese criterio. El es el juez y yo la fiscal`”.

En el fallo, por último, se deja en claro que el acuerdo económico entre Saladino y Marcos Alonso para beneficiar a Gallastegui llegaba a los 20.000 pesos y que Alonso entregó 10.000.

Esto al menos queda explicitado en el fallo con el testimonio de Emilio Alonso, tío de Marcos, cuando dice: “mi sobrino me confesó que estaba todo arreglado y que le había dado 10.000 pesos al juez Saladino y se lo llevaron a su casa. Le dije devolvé la plata, no sabes con quién te metiste”.