Axel Kicillof, flanqueado por la vicegobernadora Verónica Magario, concretó el anuncio, pero previamente dedicó un párrafo al lunes negro de la economía, por la imposición de los aranceles en los Estados Unidos, definido por Donald Trump.

Luego, enlazó el tema con la situación argentina, expresando que el presidente Milei hace absolutamente todo lo contrario a su par estadounidense.

Recordó que cuando fue la apertura del año legislativo le solicitó a los legisladores provinciales que suspendan las Elecciones Primarias en la Provincia. Si bien hay varios proyectos, reconoció, no se han podido poner de acuerdo las distintas fuerzas políticas para darle curso a algunos de ellos, por eso adelantó que remitirá un proyecto con su firma para que procedan en consecuencia. Esto produjo un cerrado aplauso de los funcionarios que acompañaban en la platea.

Luego, criticó nuevamente la decisión del Gobierno Nacional, sancionada por el Congreso, de concretar las elecciones con un sistema de boleta única, sin consultar al distrito que posee el mayor número del padrón: el bonaerense.

Agregó que han desarrollado algunas pruebas en torno a cómo se desarrollarían los comicios, en caso de ser concurrentes la elección nacional y la provincial, y "sería un caos", como sucedió alguna vez en la ciudad de Buenos Aires, recordó.

Entonces, usando las facultades constitucionales del gobernador, aclaró, definió fijar la fecha de la elección provincial el 7 de septiembre, donde se votarán cargos provinciales y municipales, recalcó.

En este sentido, Kicillof está reafirmando la posición de su grupo político y de parte de la oposición, que difiere de la que tiene Cristina Fernández de Kirchner, sus seguidores, junto con Sergio Massa y los suyos, los que conforman Unión por la Patria.